domingo, 3 de julio de 2016

EL PRINCIPITO (Antoine de Saint-Exupéry)

Por: Carola Pozo Cortez


El Principito fue publicado por primera vez en 1943. El libro es un cuento para adultos, cuyo cometido es recordarnos a todos nuestra infancia. En todo su contenido intenta despertar en cada uno de los adultos a ese niño, quizá dormido, que todos seguimos llevando dentro.

El Principito vive en un pequeñísimo asteroide. Allí comparte su vida con una flor consentida y tres volcanes. No vive tranquilo porque tiene serios problemas tanto con la flor así como con los volcanes y empieza a sentir la soledad. En esa instancia, con mucha audacia, toma una determinación: decide abandonar su casa, su asteroide para encontrar a alguien.

En ese afán, recorre varios planetas, ya sea habitado por un rey, por un vanidoso, un borracho, un hombre de negocios, un farolero, un geógrafo y en cada uno de ellos busca la amistad.

Le llama la atención el concepto de “seriedad” que tienen los adultos, le sorprende y confunde al mismo tiempo. Prosigue su búsqueda hasta que llega al planeta Tierra, pero su enorme extensión territorial y su nimiedad lo hacen sentir más solo que nunca.

El principito describe el encuentro con un aviador quién sufre una avería en pleno desierto. Allí se encuentra sin agua y con el único deseo de salir del problema. El principito le empieza a contar sus peripecias, le cuenta sobre su planeta, sus deseos, sus procupaciones, su dramática vida con la flor y el sentimiento inequívoco de la soledad.

Se encuentra con una serpiente y un zorro, el primero le da una visión pesimista sobre los hombres y lo poco que se puede esperar de ellos. El zorro tampoco colabora a mejorar su opinión, pero le enseña la forma de hacer amigos. Le dice cómo debe crear lazos: “hay que dejarse domesticar”. Y al final le regala su secreto:

“Sólo se ve bien con el corazón. Lo esencial es invisible para los ojos”

De pronto el Principito se da cuenta que, en realidad, su flor lo había “domesticado” y decide regresar a su planeta valiéndose de la ayuda de la serpiente.

Idea central de la obra

El Principito es una meditación sobre la soledad del hombre, a menudo, producto de su propia vanidad y sobre la amistad, el único sentimiento capaz de enriquecer la vida humana y restablecer las relaciones perdidas entre los hombres.

Los hombres están solos debido a su orgullo y pérdida de valores y la amistad es la única solución para enriquecerlo.

Los hombres no pueden parar en esa alocada carrera hacia lo material, no tienen tiempo para dedicarles a los otros, no dejan de preocuparse por lo que les parece importante y no hacen el intento por tratar de comprender a los demás.

Mensaje

Si se antepone la seriedad de la lógica a la del corazón, nuestra vida será vacía y sin sentido. Para salir de ella, será necesario acudir a la amistad, al amor, a ese don que esta inmerso en nosotros, muchas veces, sin salir a flote. Ese es el principal mensaje de la obra.

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